lunes, 16 de mayo de 2011

Hoy de ti vi un reflejo

Hoy, sabìa lo que pasarìa...
Me crucè por tu estàtico camino de nuevo. A veces me pregunto si no es suficiente ya hablar de ti, eres suficiente y me digo ¡ya basta! Pero te me cruzas en los pensamientos, màs ùltimamente por que me ha llegado el pensar retrasado de varios nombres. Es que me hacìa falta pensar, no le habìa dejado tiempo a mi mente para hacerlo, màs bien estaba llena de otras cosas.
Me preguntaba mucho por què ese final nunca me doliò, o no me doliò con la intensidad que debìa.¿Deverdad era por que despuès de tres años de ti ya era suficiente, o no habìa tenido tiempo de pensar?
Tambièn despuès de escribir de ti me siento mal por juzgar a otras personas, quizà no es tan patètico que no puedan olvidar o superarlo; la diferencia es que yo sigo adelante.
Pasè frente a ti, no te vì, no lo creì necesario y no tuve el valor para voltear hacia tu direcciòn, pero yo sabìa que estabas frente a mì, una silueta en el reflejo del cristal de la tienda departamental hizo que lo supiera; ahì estabas y me veìas.
Hablabas con alguien, pero despuès, en el  televisor que yo observaba habìa un mal reflejo estàtico, mirando hacia ese televisor, sòlo, y  yo, de espaldas.
Subì ràpidamente las escaleras; con ropa, perfumes y una que otra charla intentè burlar la incomodidad, pero no, seguias ahì, en mi mente molestando, arañando mi atenciòn, provocàndola para voltear, pero no, lo logrè, jamàs lo hice.
Salimos con productos varios, yo aparentando normalidad; en la esquina casi se ocasiona un evento indeseable, casi me hacen cruzarte, casi pero no.
Fuime, y ya, no voltee, no quise, no.
Despuès comencè a pensar, lo que pasò, lo que pasa ahora, ¿soy la ùnica persona buena en este mundo? Recostada en el pasto me preguntaba eso, recordè el dìa de hoy y recordè los ayeres, vi caer la noche en buena compañìa y la luna me besò las pupilas recordàndome: Estas viva y tus pensamientos, son sueño, no existen.
Ahora me recordarè las razones por las cuales te dejè atras, y me preguntarè si todo tuvo caso, quièn se merece la felicidad y quien no; me preguntarè el por què de ti y el por què de lo que pasò, recoradrè las causas y los efectos... en resumidas cuentas que por lo general duran diez minutos antes de recordar que tu no vales la pena ni para pensarte, ni para escribirte y querrè borrar esto, y me darè cuenta de que me hacìas mas daño que bien.

¿Soy la ùnica persona buena en este mundo?

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